Efectivamente, así o con frases similares se titulan mogollón de entradas realizadas estos dos últimos días en los diferentes medios, tanto “oficiales” como particulares.
Lo más habitual es referirse a “La primera nevada del año”, seguido de la primera del “invierno”. Yo he optado por referirme a “temporada”, pues en 2013 ya llevamos encima muchas nevadas y aun falta mucho para que entre el invierno.
Realmente, las primeras nevadas atraen bastante atención, bien sea por la novedad, por la impaciencia de los aficionados al esquí y otros deportes de nieve, por las implicaciones normalmente negativas que conlleva la nieve para la actividad agropecuaria o para el tráfico rodado en general…
En mi caso y para esta entrada en concreto, lo que llama mi atención es la coincidencia en el tiempo de los árboles con las hojas coloreadas y la nieve. No es que sea muy difícil o improbable tal coincidencia, pero desde luego no se produce mucho más de unos pocos días al año y no todos los años.
Sin tanto rollo, subo unas fotos que hice en un paseo por el valle de Llindelagobia, en Redes.
La nieve apareció la noche del viernes 15 al sábado 16, y cubrió por encima de unos 700 m de altitud. Estas dos primeras fotos están hechas el sábado hacia las tres de la tarde, cuando ya desapareció parte de la nieve y la capa continua está por encima de los 900 m.
Valle del alto Nalón, en las inmediaciones de Bezanes.
Valle del Nalón en las inmediaciones de Bezanes
Hayedo nevado
Hayedo nevado
Vista de la cara Este del Visu La Grande
Un paseante en Redes 